Caminata

Empecé a paso lento, tal vez con la intención equivocada, ver el mundo dar vueltas. La forma más lógica de hacerlo es lograr un viaje hacia arriba, y aunque soy de esos trabajadores honestos, no pude estar entre los 7 que hicieron turismo espacial. La manera más fácil me dije, es pisar la Tierra con atención, de todas maneras es un planeta redondo y si me apuro lo suficiente puedo lograr ver como da vueltas, ser como esos osos de circo que existían cuando el abuso animal no estaba prohibido.

oso

Durante mi travesía me dejo distraer fácilmente pero una vez que pasa la primera marejada de pensamientos me enfoco y empiezo a correr, es raro el mundo en el que vivimos, no puedo ir en una sola dirección. Encuentro por todas partes postes, muros, autos, gente estancada y el mundo sigue girando pero como yo, la mayoría no puede verlo.

Necesito un despoblado, el despoblado por otra parte no me necesita, me amenaza, no encuentro alimentos, el refugio es peligroso y solo me otorga un alivio temporal, empiezo a desesperar, veo unas flores venenosas. Quizás las pruebe…

Y entonces el mundo dio vueltas.